domingo, 5 de junio de 2011

EL LIBRO ANIMADO: DOS ACTUACIONES FINALES EN CORRALEJO

Parece que ya hemos llegado al final del camino. Después de seis meses intensísimos, repletos de trabajo, de muchos momentos de diversión y otros no tan divertidos, aquí estamos. Mi conclusión es que ha sido agotador, pero cuando recuerdo las lágrimas de emoción del día del estreno y las lágrimas de despedida de hoy, creo que a todos nos ha valido la pena.

Aquí tienen el recuento final: hemos logrado 9 funciones en total (¡y todavía ha quedado gente desconsolada porque no logró conseguir entradas para vernos!).

¡NO ESTÁ MAL, PARA UNOS AFICIONADOS!





4 comentarios:

  1. Esta vez quiero escribir yo el primer comentario, pero no para hablar del musical, ni de la fama, la gloria y las riquezas que hemos obtenido (aunque calculo que, tranquilamente, me puedo jubilar el año próximo). Es verdad que ha sido necesario un gran esfuerzo para sacar esto adelante, pero ha quedado compensado sobradamente por todo lo que hemos aprendido. Es verdad que hemos vivido algunas situaciones muy tensas y desagradables, pero creo que el balance es positivo cuando veo lo que hemos logrado hacer todos juntos, y esto es lo que hay que recordar (y si es posible, con cariño).

    Es verdad que un proyecto así no es mérito de una sola persona, sino de todas las que participan y no deseo ensalzar a nadie a costa de los demás. Pero ahora que la euforia del primer momento ha pasado, que ya estamos pensando en celebraciones, en un merecido descanso, incluso en nuevos proyectos… yo no puedo evitar mirar hacia atrás, no seis meses, sino seis años. Y mi sentimiento principal no es de orgullo ni de satisfacción, sino de agradecimiento... agradecimiento a la persona que posibilitó que yo formara parte de “El Libro Animado” (algo que debo haber soñado, porque todavía me parece increíble).

    Como no suelo derramar lágrimas de emoción, como no suelo expresar sentimientos abiertamente (como bien sabe quien intenta enseñarme a transmitirlos), en suma, como suelo actuar con exagerada moderación, cautela y contención… al pasar de los años me doy cuenta de que nunca he dicho “gracias” como se debe decir: con el corazón. Y como este es el Diario de la Banda, y en un diario se debe escribir lo que se siente, y no lo que se piensa… me gustaría darte las gracias.

    Gracias a ti toco el clarinete, mejor o peor, pero lo toco, algo que he soñado desde la adolescencia Gracias a ti he logrado entender y apreciar “un poquito” mejor la música, y espero seguir aprendiendo mucho tiempo a tu lado. Gracias a ti formo parte de una banda, que es de las mejores cosas que le pueden pasar a una persona en su vida. Gracias a ti he tocado en un musical, y he recibido tantas felicitaciones (incluida la tuya) que hasta vergüenza me da, porque considero que eres tú y no yo quien las merece. Para mí ocupas el lugar que solo pueden llenar los buenos profesores en el corazón de sus alumnos (gracias a Dios, no importa si son buenos o malos alumnos, basta con que sean aplicados). Ahora mismo no me acuerdo de lo absolutamente insoportable que has estado estos meses, ni de las todas ocasiones en que he tenido ganas de asesinarte (y han sido muchas). En este momento, me da igual si el musical fue o no fue un éxito, y también si la banda ha mejorado mucho o poco. Lo único que me parece importante es tenerte a ti como director, como profesor y como amigo.

    Y para acabar iba a decir que es una gran suerte tenerte aquí, pero me recuerda al anuncio de la cerveza, y con lo que me he currado este comentario no lo voy a acabar de forma tan cutre. Te tendrás que conformar con lo ya dicho.

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  2. Carmelo Sánchezdomingo, 05 junio, 2011

    Estas palabras están llenas de un gran sentimiento y realidad, me atrevería a decir que me han hecho derramar unas lágrimas. Nunca había leído algo así de una persona que conozco a otra que también conozco. Tienes toda la razón y estoy contigo, las cosas son o no son, y en este caso "SON". Todo esto como comentas, tiene sus baches buenos y malos pero al final tú estás ya disfrutando del Clarinete y tocando en una Banda a la cual yo quisiera pertenecer algún día también y disfrutar como lo haces tú. Un saludo, Carmelo Sánchez.

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  3. Desde Jaén estoy siguiendo vuestras idas y venidas artísticas y disfrutando de las fotos, que es lo único que puedo. ¡Qué pasada de trajes y decorados! Cómo me gustaría haberos visto. Os felicito extensamente y os doy la enhorabuena por haber conseguido esta maravilla, aunque imagino que vuestros malos ratos os habrá costado, aunque al final seguro que compensa con el resultado. Besos de la madre de Inma.

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